Prensa MPPC (26/06/25).- En el marco de la campaña por la defensa de la Guayana Esequiba, el Instituto de las Artes de la Imagen y el Espacio (Iartes) llevó a cabo el conversatorio “Miradas a nuestro Esequibo” el jueves 26 de junio. La actividad se desarrolló en la Casona Cultural Eleazar López Contreras, consolidándose como un espacio para la reflexión y el fortalecimiento de la identidad nacional a través del arte.
La jornada inició con un recorrido por el recién inaugurado Centro Cultural, seguido de la exhibición de la muestra “Miradas a nuestro Esequibo”. En esta exposición, más de 40 piezas artísticas invitaron a la reflexión sobre el Esequibo, congregando a estudiantes de la UNEARTE, la Escuela Técnica Comercial “Luis Razetti”, personal administrativo de la Escuela Técnica Industrial Robinsoniana “José de San Martín” y vecinos de la comunidad.
El evento contó con la presencia de Nelson Bastardo, coordinador del Centro Cultural, quien ofreció las palabras de bienvenida, y Miguel Ángel Baloa, director de Operaciones Políticas para las Artes del Iartes. Asimismo, participaron los destacados artistas y ponentes Joel Nacache e Yrina Gutiérrez, quienes compartieron sus conocimientos, experiencias y profundas reflexiones sobre la importancia de este territorio para Venezuela.
Para Nelson Bastardo, esta muestra itinerante forma parte de una serie de proyectos destinados a potenciar el Centro Cultural en la urbanización “La Quebradita”, promoviendo el arte como una poderosa herramienta para la reflexión y la conciencia social.
Por su parte, Miguel Baloa destacó la alianza estratégica entre la Casona Cultural y el Iartes para la materialización de esta exposición, que invita al público a meditar sobre la inalienable importancia del Esequibo como tierra venezolana. “El Esequibo es nuestro, y a través del arte podemos pensar, reflexionar y construir una identidad que nos fortalezca en la defensa de nuestro territorio”, afirmó con convicción.
El artista Joel Nacache ofreció una interpretación de la muestra desde la perspectiva de su creador, Luis Galíndez, quien lamentablemente falleció el año pasado. Nacache explicó que Galíndez, a través de su visión, buscaba expresar el arraigo y el sentir patrio hacia este territorio vital para el país. Nacache compartió una reflexión personal sobre la enseñanza del Esequibo en las escuelas, donde a menudo se presentaba como un “entramado de rayas” con la palabra “zona” en reclamación, en colores negros y amarillos, evocando una zona de conflicto. “Nuestro deber es reconocer ese pedazo de suelo y su riqueza como nuestro. Si no lo reconocemos, difícilmente lo amaremos y mucho menos lo defenderemos”, enfatizó.
Yrina Gutiérrez, artista plástica, profundizó en el proceso creativo detrás de la exposición, un camino de cuestionamiento y reflexión sobre el Esequibo. “Nos conectamos con lo que conocemos y que se vuelve cotidiano, pero si no investigamos y refrescamos nuestros conocimientos, ¿cómo podemos defender y cuidar lo que es nuestro?”, expresó. Su obra, en particular, incorpora una manguera que simboliza la conexión y el vínculo intrínseco entre el espectador y la pieza misma.
Para culminar, se anunció que próximamente se realizará otro conversatorio centrado en la exposición, abordando la lucha por el Esequibo desde las perspectivas política e histórica, prometiendo seguir enriqueciendo este diálogo crucial para la nación.




T: Prensa Iartes