Prensa MPPC (09/07/25).- “Nuestra literatura infantil y juvenil debe ser un instrumento efectivo para luchar contra las falsas percepciones, y debe ayudar a construir una racionalidad verdadera que dialogue con la realidad e incentive una nueva manera de pensar, distinta a la racionalización impuesta por el modelo mecanicista y determinista, (debe ser) más abierta y dispuesta a desaparecer lo que nos ata a los convencionalismos y con una actitud favorable al meta aprendizaje”, indicó César Luis Franco Rivero durante el cierre del VII Coloquio de Literatura Infantil y Juvenil, que se realizó en la 21a Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven).
Esta jornada, efectuada en la sala Gonzalo Fragui, estuvo dedicada a analizar las limitaciones y desafíos en Latinoamérica para el impulso de la literatura para niños.
Después de las exposiciones de la venezolana Laura Antillano y el cubano Enrique Pérez Díaz, el profesor y escritor Franco Rivero, autor de El Cayuquito de Chucho y La noche de las luciérnagas, disertó sobre lo que para él debería ser el aporte de la literatura infantil y el desarrollo de la identidad cultural del venezolano.
“Las nuevas generaciones van a vivir tiempos más estresantes de los que hemos vivido nosotros”, explicó el poeta, cultor popular y docente nacido en Manicuare, en la península de Araya, estado Sucre. “Necesitan construir saberes, conocimientos y herramientas para enfrentar la incertidumbre del futuro”, instó Franco.

Este docente popular, que durante sus años de estudiante se dedicó al rescate de la cerámica utilitaria y ancestral de Manicuare y la obra literaria del poeta Cruz Salmerón Acosta, destacó las posibilidades y oportunidades que ofrece la literatura para niños. “Desde la literatura infantil y juvenil podemos ayudar a labrar ese camino, esta puede ser una estrategia para enfrentar las incertidumbres por venir, y eso significa una apuesta: integrar la incertidumbre a la esperanza de poder construir los saberes y conocimientos para salir triunfantes”, explicó.
“Aunque la literatura infantil y juvenil en América Latina vive un momento apasionante, también enfrenta desafíos significativos que no podemos negar”, advirtió Franco, quien recalcó que “uno de los retos más urgentes es la promoción de la lectura en entornos digitales, donde las pantallas compiten constantemente por la atención del niño”.
“Las redes sociales, los videojuegos y el entretenimiento visual inmediato representan una competencia difícil de contrarrestar si no innovamos en formatos y estrategias”, señaló.
“Sin embargo, se puede notar una cierta sensibilidad por dar aportes en la literatura para construir desde la infancia”, señaló el escritor, mientras explicaba que una identidad cultural arraigada en las costumbres, modos de pensar, tradición social “aún no encuentra una propuesta literaria comprometida con la intención de establecer, en las próximas generaciones, un compromiso por la transformación de las condiciones del contexto”.
César Franco apuntó que “la respuesta muchas veces puede encontrarse en lo que nosotros creemos pequeño”, y en este sentido, “la literatura infantil no solo es entretener. Debe formar identidades que enlacen el corazón y la mente a la defensa y protección del lugar de origen, seducidos por el amor que hemos construido con el contexto”. Por tanto, insistió en que la literatura infantil “debería ser una ayuda para considerar nuestras raíces, nuestras costumbres, nuestro territorio, nuestra historia y nuestras luchas”.
“Cómo enseñarle a los niños sino con un cuento ameno, en el que ellos puedan ver lo que está pasando, enseñarles la realidad con la fantasía expresada en esos cuentos que son atractivos de leer, porque ellos se encuentran ahí reflejados como protagonista”, propuso.
César Luis Franco Rivero se define a sí mismo como un “ambientalista, agricultor orgánico, sembrador de árboles y de agua”. Ganó la VI Bienal de literatura infantil (poesía) Cruz Salmerón Acosta (2021), con su obra El Cayuquito de Chucho. En 2023 fue premiado en la I Bienal de literatura infantil y juvenil (narrativa) Carmen Delia Bencomo, con su obra A las nubes en un velero.
T: Prensa Cenal